martes, 1 de septiembre de 2009

Dulces diarios

Anécdota diariera:

Mi amiguita Lu, unos cinco años, pre-cio-sa, viene a visitarme a mi esquina diariera y me pide lápiz y papel, y la tablita donde apoyo mis anotaciones.
Su dibujo: una Lu grande y en primer plano, como corresponde. Una Ana más atrás, más pequeña, con los brazos levantados. En medio, una flor. Una rosa parecida a la de El Principito.
-Tomá, te lo regalo -dice la princesa Lu-. Te hice triste a vos.
-¿Por qué me hiciste triste? -le pregunto.
-¡Porque estás buscando una flor y no la ves! Y está detrás de vos...

Si esto no es sabiduría, la sabiduría, ¿dónde está?

Gracias, Lu


A.S.M.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me encanto....me encanto...me encanto

Pablo