domingo, 20 de febrero de 2011

HAY DÍAS...

Hay días...

Hay días así.

Así.

La luz no llega a tus rincones.

El aire te pesa

en la piel.

El licor azul del cielo

no pasa por tu garganta.

La cosquilla verde

no te acaricia

la planta de los pies.

Días de bruma

de niebla

de borrón.

Y la cuenta nueva tarda tarda

tarda en arrancar.

Hay días

para contar hojas caídas

voces mudas de amor.

Días de sentir empujones

y de añorar abrazos.

Así

como cuando la puerta del paraíso

sigue cerrada

aunque estés comiendo

un helado de chocolate.

Así

la voz que te cantaba

pasa lejos, muy lejos

o se convierte en bocinazos.

La piel que te dibujaba se secó.

La sonrisa que te asoleaba

se apagó.

Entonces

oís tu nombre

a lomos de esa vocecita amada

te columpia, te sacude

esa risa chiquita

inmensa...

¡Y la vida se enciende

otra vez!


A. S. M.

2 comentarios:

Pablo dijo...

Hermoso poema. Muy sentido. Me gustó. Que verdad: la vida siempre vuelve a encenderse.

Anónimo dijo...

HOLA ANA! Muy lindo el poema, me hizo acordar a uno de Miguel Hernández, pero que no termina optimista: "Hoy estoy sin saber, yo no sé cómo, hoy estoy para penas solamente, hoy sólo tengo ganas de sacarme de cuajo el corazón y ponerlo debajo de un zapato". El resto no lo recuerdo, tenía una parte "y pienso en aquel alto campanario, para un salto mortal, serenamente".
Bueno, no bajoneo más. La quiero felicitar por su comentario hoy "El Mercedes Sosa con pantalones". Tenés mucha razón, al final, las mujeres, cuando resaltamos en algo, es porque somos como algún hombre...Al vesre, never in the puting life!!
Besos!
Silvia de Don Torcuato